martes, 14 de abril de 2009

Sensaciones de la carrera

¿y cuanto cuesta volver a la realidad?

Hoy haré mi primer entrenamiento después de Sables. No es que tenga mucho ansia por volver a correr, simplemente tengo “ganas”. Ganas de trotar un rato. Soy consciente de que en la mayor parte de los entrenamientos futuros tendré en la mente por un tiempo el Maratón des Sables y todo lo que ello ha conllevado. Pero de eso hablaré mañana.

Me llevo un recuerdo muy grato de la carrera. Una auténtica lección de saber hacer por parte de la organización de la que yo dudaba en un principio pero que ha sabido y podido sacar una carrera adelante cuando tenían todo en contra. Para mí se merecen un diez porque no era tarea fácil y ya he visto otras organizaciones con la mitad de problemas fracasar de manera estrepitosa. Algunos detalles serán inolvidables. Y si bien es cierto que tiene un gran componente de circo mediático, de prensa, de cámaras de… en parte es por eso que esta que carrera está donde está, sobreviviendo 24 años, con lista de espera cada año con más fieles seguidores. Tiene un gran valor. Mi enhorabuena para ellos.

Desde el punto de vista deportivo estoy muy satisfecho con lo conseguido, he llegado hasta donde podía hacerlo. Me he esforzado al máximo durante la competición para dar todo lo que tenía.

¿Podía haberlo hecho mejor? Pues desde una pantalla de ordenador y tras una semana de reflexión pienso que quizá si, pero desde allí se ven las cosas de otra manera y creo que hice para el puesto para el que realmente estaba preparado. El caso es que creo que he cumplido.

Ahora bien la verdadera magnitud de Sables para mi no ha sido la deportiva ni la organizativa. Creo que ha ido un poco más allá. La verdadera magnitud han sido mis compañeros, el equipo Alua. Cada uno con su granito de arena me han aportado mucha satisfacción estos días. Son tu pequeña familia allí. Sobra decir que me han tratado como a un hermano o a un hijo. Es posible que las cosas lejos de casa se magnifiquen, pero la realidad es que hace años conocí a un grupo de gente en un aeropuerto camino de otro desierto. Desde entonces han sido compañeros inseparables en multitud de aventuras, y lo de compañeros es lo de menos, han sido son y espero que sigan siendo unos muy buenos amigos. Como dije el otro día les echo de menos desde que se fueron para Algeciras. Muy buena gente.

Mi Sables ha sido toda la gente con la que me he topado, Luz, Misael, Zanoni, El resto de pinto, la haima 40 al completo, Alfonso, Alua al completo, Ismael, Ecros, Artemio, Josef, el gran Jorge, el mago Pepo, los otros de Cádiz, los mejicanos, el resto de españoles, no se, un montón de buena gente que te ayudan y a las que ayudas nada más conocerte. Compañerismo lejos de la competitividad, lejos de puestos de marcas y de historias. Eso ha sido mi Sables.
Una cura de humildad. Un niño que te aparece y te quiere dar la mano al pasar, y tan solo quiere hablar contigo, sin videojuegos, sin juguetes, sin zapatos, pero con una sonrisa difícil de ver por aquí. Están ahí al lado pero tan lejos. Gente que aquí se mira con recelo y allí te llaman la atención. Eso también es Sables y una parte muy importante del Maratón.

Sables es dunas, arena, desierto, sol, lluvia, estrellas, muchas estrellas. Emociones, alegría, miedo, dolor, tristeza, ansia, hambre, sudor, ampollas.
Hemos sido 1000 corredores y 1000 organizadores. No ha habido un maratón. Han sido 2000 Sables, o más, porque había muchos Sables aquí.

Sables ha sido el proyecto, sables ha sido la respuesta al proyecto. Pero de eso hablaré mañana.

8 comentarios:

Syl dijo...

Cacho atracón me he pegao!!!...hasta arena me salía ya por las orejas!!!

Parece que hasta lo haya vivido...entre tus escritos, tus pequeños videos y los de la organización, creo que ya no me hace falta ni ir!!!...

Besitos y felicidades por haberlo vivido así...con esos compañeros tan entrañables.

Ps: me ha dado mogollón de risa el video de las costureras de ampollas!

Abe dijo...

Hoy aprovechando que estoy con un pasmazo de campeonato me he dedicado a leer con detenimiento todo lo que has descrito. La verdad es toda una aventura y leerlo me causa una mezcla de respeto por la dureza del tema y sana envidia.
A mi el vídeo de las "ampollas" no me ha causado tanta risa, bueno la verdad que un poco sí, sobre todo pensando en que fuese yo una de las "costureras" tengo fobia a las agujas ;D
Un saludo.

Guille dijo...

Se va a echar de menos seguirte en tu camino. Espero encontremos alguna aventura que hacer juntos.

250km solidarios 2009 dijo...

Seguro que si guille. Más de uno encontraremos

Sofía dijo...

Esto va tocando a su fin...se va a echar de menos el conectarte todos los días y leer cómo va la cosa, nuevas andanzas...Nada, que te tienes que envarcar en otra aventura del estilo, y contarla por via blog.
Nos has hecho vivir tu carrera por el desierto como si fueramos nosotros los que estubieramos alli corriendo, entre los nervios que pasamos con Josero y ahora tu relato detallado nos hemos sentido unos ultrafondistas más.
Mi enhorabuena por todo lo que has conseguido. La carrera, pero sobretodo el proyecto. Hacer que tanta gente aporte su pequeño o gran granito de arena,que se enganchen a la aventura...eso no lo consigue cualquiera.
Y nada, mañana creo que se avecina un post emotivo..y el viernes????Primicia???
Un besazo, y tambien de mis padres y de marcos

manuelobe dijo...

Gracias. Si me vas a hacer llorar y todo.

Lo mas importante, el proyecto. Eres un campeon "redomao"

fahersan dijo...

Sabes que yo sí que soy de lágrima fácil...
Estoy muy de acuerdo contigo, este "mundo" está lleno de sensaciones humanas y deportivas que lo hace único. No puedo pensar en un Sables, en un Hoggar, en lo que sea... sin que vayamos haciendo piña. Un fuerte abrazo. Javier.

Merak dijo...

sables también has sido tú.