Sábado a las 11 y media de la noche. Fin de semana intenso. Ayer estuve en Burgos en el colegio El Alba con los niños, los educadores, en el Centro de Día, en la radio. Fueron momentos muy emocionantes, en los que tuve un experiencia realmente espectacular. Si todo esto tiene un sentido lo de ayer lo elevó a la enésima potencia. Tanto es así que se merece un capitulo aparte que trataré de relatarlo con mas tranquilidad mañana, donde me gustaría transmitir una parte de lo que ayer sentí. Sinceramente lo veo difícil. Mi motivación se ha visto multiplicado por 1.000.
Hoy como estoy en Tordesillas por un tema personal por el que no he podido ir al maratón de San Sebastián., no pasa nada.
El titulo de hoy de alta tensión tiene un doble sentido, la tensión y emoción que sentí ayer en Burgos en el colegio y otra mucho más graciosa, vista desde ahora, que es la que ha sucedido esta noche entrenando.
He salido a correr por un recorrido habitual de mis visitas a Tordesillas, por el pinar, el rio, etc… Es un circuito en el que suelo hacer unos 16 km, y por un lugar realmente agradable. Cuando llevaba un buen rato rodando y estaba cerca de la carretera he oído unos cuantos perros ladrando cerca. Lo habitual. Además suelo pasar por una finca que está cerca de la carretera donde tienen un perro normalmente atado. Me ha ladrado como siempre, pero al darme la vuelta he visto un perraco que venía hacia mi. En un momento me he visto realmente “acojonado” sin saber donde meterme. Me he tenido que subir un rato a un poste de eléctrico de alta tensión donde he estado un buen rato hasta que el perro se ha largado. Luego he salido pitando como alma que lleva el diablo hasta Tordesillas. Una situación más para contar. Mañana entreno en Madrid.
Os prometo colgar fotos de ayer. Merecen la pena.
Hoy como estoy en Tordesillas por un tema personal por el que no he podido ir al maratón de San Sebastián., no pasa nada.
El titulo de hoy de alta tensión tiene un doble sentido, la tensión y emoción que sentí ayer en Burgos en el colegio y otra mucho más graciosa, vista desde ahora, que es la que ha sucedido esta noche entrenando.
He salido a correr por un recorrido habitual de mis visitas a Tordesillas, por el pinar, el rio, etc… Es un circuito en el que suelo hacer unos 16 km, y por un lugar realmente agradable. Cuando llevaba un buen rato rodando y estaba cerca de la carretera he oído unos cuantos perros ladrando cerca. Lo habitual. Además suelo pasar por una finca que está cerca de la carretera donde tienen un perro normalmente atado. Me ha ladrado como siempre, pero al darme la vuelta he visto un perraco que venía hacia mi. En un momento me he visto realmente “acojonado” sin saber donde meterme. Me he tenido que subir un rato a un poste de eléctrico de alta tensión donde he estado un buen rato hasta que el perro se ha largado. Luego he salido pitando como alma que lleva el diablo hasta Tordesillas. Una situación más para contar. Mañana entreno en Madrid.
Os prometo colgar fotos de ayer. Merecen la pena.
5 comentarios:
¡Joder! Y con la foto esta del perro que has puesto ...
el susto que me llevé gué morrocotudo
el sitio ese no será el que yo conozco, no?
no seria yo el que apostara por quien llegaba antes a tordesillas, si el perro o tu jajaja... tienes que hacer la sureste trail, tio...!!!!
como te fué artista?
y si, es el sitioq ue tu conoces
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