viernes, 19 de diciembre de 2008

Viernes que te quiero viernes



¡Coño que rasca! He salido a entrenar hace un ratito de noche con una rasquilla bien curiosa. El caso es que iba salir con el solete pero me he tomado tres cervezas con unos amigos y como no podía ser de otra manera he estado toda la tarde dormido, la cerveza es buena para recuperar sales. Ni tan mal. Luego me ha dado el perezón del siglo.

Ayer al final fue un rodaje muy tranquilito a las 10 y pico de la noche y llegué a casa a las 11 y algo. Como Dean. Solo me faltó correr con la pizza en la mano y el tomate chorreando por la camiseta. Os aconsejo el libro que edito no hace mucho titulado Ultramaratón. Es un reflejo un pelo exagerado pero que describe bien lo que es el mundo de las carreras de ultrafondo y el sufrimiento que se pasa durante las carreras.

Hoy han salido unos 15 kilómetros más.

Mañana quiero salir a correr con la mochila vacía para probar a ver que tal va el tema. Os contaré.

Voy a cenar que ruge el tigre.

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